LA REALIDAD NO ENGAÑA – Por Leo Silveira. Fotos: Gian Giaimo
El sábado pasado en La Trastienda Club Montevideo siendo casi las 10 de la noche (una de las cosas por las que más me gustan los shows en este lugar), desde el escenario se iluminó con unos potentes rayos azulados que recorrían toda la sala sobre nuestras cabezas mientras una introducción sonora, hipnótica hizo que los pocos lugares vacíos que quedaban adelante, luego de haber terminado de escuchar el prolijo, pero tal vez extenso set de los teloneros “Asteroids” (que llegaron desde Bs.As. para la fiesta), se ocuparan rápidamente y terminara de colmarse de público prácticamente todo el local. Aparece Boomerang en escena con un Gonzalo Zipitría engalanado con una capa negra que lo hacía parecer héroe y villano a la vez, y ahí mismo comenzó el viaje musical a bordo de su nuevo disco “Engañamundos” (editado por el sello Bizarro), pasando por algunas canciones de sus trabajos anteriores “Complicado” (2009 Contrapedal) y “Premiere” (2005 Koala) disco del cual eligieron “Seducime” para cerrar un show musicalmente excelente con una formación especial con percusiones, una sección de vientos y proyecciones visuales romboides muy bien logradas. Algo que siempre tuvieron los Boomerang a lo largo del tiempo es esa cierta irreverencia y postura indómita, apoyada en su vocalista (una de las voces destacadas de esta nueva era del rock nacional), ahora con algún cambio en su formación original, pero el gran show que disfrutamos la noche del sábado demuestra que Boomerang ya es una banda que representa el recambio generacional, que suena compacta, sólida, que enciende rock ,que pasea por la elegancia pop y conecta con el público con letras más directas y pegadizas; público que se va sintiendo cada vez más a gusto con su propuesta. La realidad no puede engañarnos, Boomerang pide pista para despegar desde hace rato.