Los seres humanos han marcado su piel de forma permanente durante miles de años. Un tatuaje puede ser un recuerdo, una oración constante, una advertencia, o simplemente un trabajo increíble de arte. La razón detrás de ello puede ser muy personal, decorativo, caprichoso o utilitario. Pueden significar la lealtad tribal, historia personal, o nada en absoluto.
Seguramente quienes no conocen, al igual que yo, el asunto de las modificaciones corporales les resulta llamativo, no por el hecho de considerarlo un estigma social, sino más bien por la ignorancia propia frente a este tema, que a pesar de ir in crescendo, aún no está del todo arraigado en la cultura uruguaya. Los antecedentes del tatuaje se remontan a la edad de hielo, aproximadamente 8.000 años a.C. en la que se practicaban adornos corporales con tintas en casi todas las culturas, con connotaciones religiosas, guerreras, estéticas, marginales, etc. Los egipcios, los roma- nos y los japoneses son algunos de los que más los utilizaban. Marco Polo, en su travesía decía que el respeto a una persona se medía por la cantidad de tatuajes que tuviera. Eran finales de los 80 e influenciados por la cultura extranjera cuando nacen los primeros tatuadores uruguayos, quienes imitando estilos, eran autodidactas en su mayoría. Al principio aparecen las máquinas rotativas hechas a base de materiales artesanales como motores de radio, portaminas, etc. Ya por el 2000 llegan las primeras máquinas electromagnéticas a base de bobina, junto con agujas presoldadas y una gran variedad de tintas. Es así como el tatuador uruguayo comienza a abrir sus espacios migrando al extranjero en busca de conocimiento y enriquecimiento cultural. Ya no se sienten plenos al plasmar un tatuaje prediseñado, más bien se inicia la concepción de que cada pieza gráfica debe ser única y con un sentido determinado. Actualmente a pesar de ser un mercado instaurado fuertemente, queda mucho por mostrar y aprender de esta cultura, para que así el tatuaje sea valorado como lo que es, un arte que precisamente al poseer un soporte diferente al común, como lo es la piel, lo hace algo digno de valor gráfico por todo lo que conlleva compositivamente.
Algunos Mitos sobre los Tatuajes
QUIERO MI TATUAJE MÁS BARATO
Volvete a tu casa. Si estás preocupado por el precio de la compra, seguro que estás por ser tatuado por todas las razones equivocadas. Si en serio querés tener un tatuaje, tenés que obtener exactamente lo que querés, incluso si tenés que ahorrar algunos meses para hacértelo.
LOS TATUAJES AHORA SON ACEPTADOS POR LA SOCIEDAD
Sí, más que hace 10 o 20 años, pero no tanto como pensás. Todavía muchas personas lamentablemente tienen prejuicios con respecto a esto. Aun sigue habiendo compañías que dentro de sus políticas de selección de personal no permiten tatuajes visibles.
CUALQUIER ARTISTA PUEDE HACER CUALQUIER TATUAJE
No necesariamente. Aunque la mayoría de los profesionales son capaces de realizar una variedad de estilos, por lo general tienen una especialidad. Ese artista que es conocido por su trabajo tribal puede no ser la opción para un retrato o imágenes más realistas. Encontrar al tatuador que tenga el estilo del tatuaje que querés es clave.
NUNCA ME ARREPENTIRÉ
Sí, claro, ese tipo de ahí todavía piensa que el amor verdadero es tener el nombre de su ex-esposa para siempre tatuado en su pecho. Si un tatuador se niega a hacer un diseño particular, pensalo, puede tener una buena razón.
LAS AGUJAS DE TATUAJE SON UNA SOLA
La gente suele pensar que los tatuajes se hacen con una sola aguja. En realidad se realizan con unas agujas que se agrupan juntas y soldadas en grupos de números impares: 3, 5, 7, etc.
LOS TATUAJES SE VUELVEN AZULES
Mucha gente tiene la imagen de los viejos tatuajes azules de los años 50 y 60, pero hubo numerosas mejoras en la calidad de la tinta y el equipo de tatuaje.
SANGRAN MUCHO
En la mayoría de los casos, el esquema no debe sangrar en absoluto y el sombreado no debe sangrar durante más de 5 o 10 minutos. Al salir de la tienda de tatuajes, al tatuaje se le colocará una venda, pero por lo general ha dejado el sangrado.
LA TINTA ROJA SE DESVANECE
Algunas veces los colores como el rojo y el azul se desvanecían un poco. En la últimas generaciones, innovaciones en la tinta del tatuaje han permitido pigmentos que no son tan fácilmente afectados, lo que les permite mantener su brillo.